miércoles, 5 de diciembre de 2007

la noche


Yo me duermo a la orilla de una mujer: yo me duermo a la orilla de un abismo. El libro de los abrazos. E. Galeano

Cuando pinte este cuadro pensaba en el mar , salí al cobijo de la sombra estival en mi pueblo de castilla, con el lienzo y el caballete en ristre, mirando el mar amarillo, pero lo que realmente me llamaba la atención eran las rocas, estas tocas se convirtieron en el perfil de una mujer tendida al abismo, descansando, imagino que pensando, ¿en qué? Quien sabe lo que piensa una mujer, ni ella misma.

Porque sólo tiene cuatro lados, si fuesen mas, tendría muchas mas lecturas…puedes ver un perfil, el hueco que deja una silueta llena de dolor, una cascada…, tan sencillo como encontrar la luz y la posición adecuada para buscar semejanzas

Lo bueno de no ser nada… es que puede ser todo, uno mira, asocia y encuentra su solución, no hay nada más abierto que un silencio.

2 comentarios:

Iván dijo...

Veo una persona caminando invertida bajo el cielo de un anochecer entre trigales... Un deseo escondido entre la inmensidad de un mundo ajeno a uno mismo.
No tengo mucha formación pictórica. Pero prometo esforzarme más.
Un beso!

isobel dijo...

no te preocupes por la formación, lo importante es sentir o que se creen dudas y con un poco de suerte respuestas